Las tarjetas de visita son un mundo aparte, cuyo lado más oscuro hemos visto en películas como American Psycho.
Para la mayoría son una parte más en actos de networking o de socialización. Normalmente y en los tiempos que corren acaban en la basura cuando sus datos se convierten en información electrónica. Atrás quedan para la mayoría de nosotros aquellos tarjeteros de antes.
Por ello resulta curioso que alguna empresa quiera regalar a alguien una tarjeta de visita que incluye una pantalla y un altavoz capaz de reproducir audio y vídeo. También tiene controles integrados para manejar la reproducción de vídeo e incluso un conector mini-usb para transferir datos.
Pero vaya, que has de estar muy seguro de tus ventas para ir regalando tarjetas que cuestan unos 22 euros cada una. Aunque claro, hay veces en que la imagen prima más que el sentido común.
2 comentarios:
Joder que PRO la tarjeta, se nota que es de un Casino... Yo creo que Alberto puede poner algo parecido en el suyo eh :P
ehh. strange !
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