El título del artículo no se refiere a que haya llovido en Valencia en el día de las mascletas, sino a la delantera rojiblanca. Los colchoneros han fallado más que el Dioni intentando conseguir un peluche en la feria. Como ha dicho el bueno y blanco de Valdano “El Madrid no ha perdido dos puntos, sino que ha ganado uno”. Más de un rojiblanco necesitará una caja de “Dormidina” para conciliar el sueño esta noche, porque que el atlético no haya vencido esta noche, es para hacérselo mirar a los chicos de Abel. El Barça por su parte cumplió con las expectativas y venció a un Bilbao que pudo llevarse un saco de goles del Camp Nou. Lo dicho señores, estamos a jornada 26, quedan 36 puntos y muchos goles. La liga seguirá siendo una goma que se estira y se acorta en forma de puntos durante muchas jornadas, mientras tanto que no os engañen ni los catastrofistas, ni los eufóricos, ni los Manolos…
El derbi madrileño presentaba en sus primeros minutos varias novedades. El atlético salía mordiendo desde el primer minuto y sus pantalones seguían con el color rojo inicial, Lass partía como reformado lateral derecho con tal de que Michel Salgado pudiese terminar el paquete de pipas del “Makro” que se compró a principio de temporada, y Boluda (el presidente con el pelo de Mijatovic, la boca de Calderón y la chulería de Schuster) presidía su primer derbi. Empezaron adelantándose los visitantes mediante Forlán, sin lugar a dudas el mejor de la noche. En un córner botado por los blancos, los visitantes no solo despejan, sino que arman una contra que ríete tu de los italianos; el Kun la conduce con el aliento de Lass en la espalda, deja para Forlán y el uruguayo no perdona. Llega el descanso en el Bernabéu y el Madrid, conocedor del resultado en Can Barça, necesitaba despertar en la segunda parte.
A los pocos minutos de la segunda parte, Juande Ramos realizó unos cambios que eran necesarios. Saltó Higuaín para dar más mordiente a un equipo que no encontraba el gol, saltó Salgado para que Lass pudiese volver a su posición natural y entró Heinze para que Saviola tuviese alguien con quien hablar. La reacción blanca no se hizo esperar y llegó el gol. Higuain en la frontal, pasa para Huntelaar que en claro fuera de juego fusila a Leo Franco y pone el empate en el marcador. El holandés a partir de ese momento volvió a ser el delantero que fue a comienzos del encuentro y desapareció. Pero hasta el final del encuentro el partido lo dominaron los atléticos.
El Kun, Forlán y compañía, disfrutaron de unas ocasiones de gol clarísimas, lo que ocurre es que definieron como Drenthe y no materializaron ninguna. El Madrid no se rebeló, el atlético no sentenció y el partido se acabó. Empate a puntos que deja un sabor amargo en los colchoneros, un respiro de alivio en los merengues y el auténtico sabor a derbi a los allí presentes. Vamos con los catalinos.
Al Barça se le presentaba la oportunidad de ensayar su merecida final de Copa ante el otro, no menos merecido, finalista del mencionado título. Los locales empezaron el partido con el futbol que saben, de toque, de calidad y de marear al rival. El primer gol lo marcó Sergi Busquets. El canterano remata de cabeza un saque de falta lateral botado por Xavi Hernández.
Más tarde llegaría el polémico penalti a favor del Barça. Iniesta, el futbolista con color de yogur de coco, regatea dentro del área y choca con Gurpegui. Personalmente creo que es penalti, ya que el choque existe en la rodilla y la cadera, y no en los tobillos como suele ocurrir. Messi lanza la pena máxima más tranquilo que un Koala en una foto y gol para el Barça. Para descanso de los allí presentes a Valdés no le tiraron a puerta en toda la primera parte. Llegamos al descanso.
La segunda parte de los locales en el Nou Camp fue muy parecida a la que realizó el Atlético de Madrid en el Bernabéu, solo hay que cambiar el color de las camisetas, de las medias y de la piel. Etoo estaba tan obsesionado con el gol como Paco Martínez Soria con las alemanas y Henry sigue definiendo con la maldad del corderito de Norit, las pocas pelotas que Etoo le dejaba. El Barça pudo meter muchos goles, pero ninguno tan valioso como el que metió Forlán. Final del partido y ahora toca Champions.
La papa aliña: Joaquín Caparrós. El entrenador andaluz ha conseguido la posibilidad de ganar un título para los bilbaínos. El último título conseguido por los leones se levantó hace la friolera de 24 años. Esta sería su primera copa en HD.
El babuchazo: José María Del Nido. El presidente del Sevilla tiene la costumbre de peinarse como su apellido indica y de hablar más de la cuenta. Sentenció que se iban a comer a los leones del athlétic y se llevaron tres goles como cabeza de…. Leones. Menos hablar y más jugar.
1 comentarios:
Una jornada más, fiel reflejo escrito de la jornada de los dos aspirantes al título de liga del fútbol español... Enhorabuena por tus palabras tan certeras.
Sobretodo suscribo lo de que la gente no se deje influenciar por los Manolos ni por intereses periodísticos partidistas de uno u otro color...
Un saludo!
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