(Leer primero: "Capítulo 3: El tiempo pasa volando")
Seguro que cualquier cosa rara que pienses, sólo son imaginaciones tuyas... No te comas tanto el coco. Pero es que es muy raro...¿Y si ya estaba puesto lo de cerrado, pero tú lo has visto abierto? A ver... no estás loca. ¿Qué puede haber sido? Bah, seguramente alguien habrá pasado por allí y le habrá dado la vuelta al cartel, al ver el aspecto de la tienda por fuera.
Vuelves a casa rápidamente (además, hace frío) y date una ducha para despejarte, que ya estás un poco emparanoyada.
Bien, tras despejarte un poco mientras cantabas tu disco favorito mientras te duchabas, no te entretengas y ve a comer del tirón porque tienes más hambre... ni has merendado, así que las tripas te suenan bastante. ¿Qué hay de comer? ¡Perfecto! Filetes de pollo empanados, con sus patatitas fritas al lado... qué arte, la verdad es que es uno de tus platos favoritos, así que come hasta reventar.
Cuando terminas, decides irte para tu cuarto pero no para ir directamente a la cama; tienes una cosa pendiente: Leer. En una mano, el libro. En la otra, la revista. Empieza por echarle una ojeada a la revista. " 'La tienda de Moe', gran variedad de artículos mágicos." Pues la verdad es que es un buen catálogo, están todos y cada uno de los artículos que por allí estaban, con su precio y demás. La verdad es que no son muy caros, están bien de precios. Pues lo que más te llama la atención es la sección de colgantes, los hay muy bonitos. Aunque cuando pasas la hoja y llegas a la parte de amuletos, ves que hay amuletos para tener suerte en numerosos campos de la vida (amor, trabajo, salud... vamos, lo típico) y en la penúltima hoja (por ahí vas hojeando) ves el mejor amuleto de todos. Su nombre es 'El Amuleto del Poder'. Está mostrado en grande, ocupa toda la hoja. No pone precio. Sólo se ve su foto y abajo un pequeño texto que dice: "Sólo el indicado puede llevarlo". Vaya paranoia, seguro que es una frikada de éstas para tener gancho y que la gente se pase por la tienda. Lo curioso es que ya ha ganado uno, porque tú vas a ir mañana a la tienda. ¡No cierres la revista aún! Queda la última hoja, que es diferente a las demás. Es distinto hasta el papel. Su color es amarillento, como un blanco ya desgastado. Da la impresión de que sea una hoja arrancada de algún sitio y puesta ahí. Es más... sólo tienes que cogerla un momento... y ¡verás que está despegada! ¡Vaya! Es un recorte de un libro, lo han metido ahí. Qué curioso. ¿Será sólo en esa revista? ¿Seguramente en todas, verdad? Fuf... estas cosas no te hacen mucha gracia, la verdad... pero lo que sí es verdad es que te intriga. Además, las letras están escritas a mano, y por lo visto a pluma porque se nota la escritura con tinta negra, sobre ese papel... tipo pergamino, o algo así. Es a lo que te recuerda, pero vamos, se nota que está arrancada de un libro, aparentemente viejo. Y muy viejo.
En la hoja pone lo siguiente:
...y ya era hora de que tomase ese camino."
Mmm... pues un poco raro. Más bien... cómico jaja porque vaya tela. Habla de que alguien tiene que tomar su destino... y por lo que dice al final, ese alguien ya ha tomado ese camino, donde no se lo va a creer, pero lo tiene que creer y cumplir una misión... vaya tela, a tí te gustan los libros extraños, sí; pero esto ya es pasarse. Parece como sacado de una leyenda élfica o cualquier tipo de textos así a modo Señor de los Anillos o similares.
En fin, el cansancio te puede y por eso métete en la cama con tu libro, para leer un poco antes de quedarte dormida. ¿Dormida? Tú no te puedes quedar dormida con la de cosas raras que te han pasado hoy. No ha sido normal. Ha sido un día extraño. Demasiadas casualidades, sí, se han puesto de acuerdo para coincidir todas en el día de hoy y así hacerte pensar en cosas raras. Pues pasa de todo, porque mañana será un nuevo día e incluso interesante, porque por la mañana ya tienes plan. Pero es que... ¡la hoja esa! ¡Es como si la hubieran puesto adrede! Claro, la han puesto adrede, si no... pues no estaría. ¡Argh! Te está doliendo hasta la cabeza... lo mejor será que olvides eso y dejes de pensar en ello...
En fin, lo que haces es ponerte a leer aunque sabes que te quedarás dormida. Así que te pones a leer por dónde ibas hasta que tu cuerpo aguante...
"Y Abi, desobedeciendo a su madre, fue de nuevo al bosque donde no encontró a nadie. Qué raro. Había quedado con alguien, es más; se supone que debería estar allí. La verdad es que Abi ha pasado unos días muy nervioso porque...."
Te has quedado dormida, sí. Porque despiertas de un sobresalto. Vaya sueño más raro, ¡qué pesadilla! Y encima el sueño... ¡iba de la dichosa tienda! Eso sí, te encuentras como...
0 comentarios:
Publicar un comentario