El Hombre Que Caminaba Por La Luna

Posiblemente este sea el artículo menos preparado y peor redactado (que ya es decir) que haya escrito, pero la muerte de JACKO para nuestra generacíon es para lo que nuestros padres fue la muerte de John Lennon, para nuestros hermanos mayores la muerte de Kurt Cobain o para Amy Winehouse el cierre definitivo de la fabrica de cerveza Skol. Digo que es el peor redactado porque lo escribo directamente sobre el blog y considero poco profesional este estilo por parte de un periodista como yo (si Manolo Rollo es humorista y Tata Golosa cantante, yo soy periodista, monologuista y jeque arabe si abro un kebab).

Michael Jackson nos ha dejado un legado impresionante y sus acciones eran continuas lecciones de vida que nos dió durante largos años. Primero nos enseño el "Moonwalker", ese paso de baile en el que cuando lo hace Michael es un tio dando pasos hacia atrás pero se mueve hacia delante y cuando lo haces tu es J.J. Santos limpiandose una caca de perro que acababa de pisar. Más tarde nos enseño el paso de cuyo nombre no quiero acordarme y que consistía en hacer como que te echabas hacia delante pero tus tobillos quedaban en posición vertical y no te movías del sitio. Este mismo paso lo intentó hace un año Gaby Milito y todos sabemos lo que ha jugado este año gracias a su gracia con el tobillo. Y por último, pero no menos importante nos enseñó a gritar "Aúh!" y a apretarnos los huevos. Es normal, que despues de tanto concierto y tanta gira esa mano ya empezase a oler a compañerismo y el americano optase por ponerse una mascarilla de pintar a pistola para evitar coger algo malo.

Cuentan las malas lenguas que la famosa escena del artista con el bebe recien nacido asomando por la ventana fue un acto propio de un loco, pero yo sostengo la teoría de que Michael tras sotenerlo en brazos durante un rato, fue el propio bebé el que le dijo "Aúh! sacame a que me de el aire, que a tu estas muy bien con la mascarilla pero aquí huele a granjero busca esposa". Es simplemente por eso que la escena es una mezcla entre prisa para salvar la vida de su bebé y acojone por la precocidad oral del neonato.

Que Michael Jackson era un artista desde pequeño nadie lo dudó, pero que era negro ya tengo yo mis dudas. Yo sostengo que Michael era blanco desde pequeño lo que ocurre es que cuando se despertaba se miraba al espejo y estaba peinado como un pelocho, le decía buenos días a su padre y este le daba con la correa en toda la boca y para colmo tu hermana se llamaba Latoya en un barrio obrero (equivalente a la vane a día de hoy). Al pobre chico lo tenían "negro". Disculpen este chiste pero entiendan que estoy falto de entreno. Solo el paso de los años hicieron que el muchacho se relajase y mostrase su verdadero color de piel: sepia enferma, yogur de coco o Iniesta asustado, depende del día.

En fin, el propósito desde artículo era arrancaros una sonrisa en un día triste para la música y en el que parece que haya que llorar e irnos a dejar velas a la plaza de España, por decreto ley. No es así como recordaré a Michael, sino con una sonrisa y con un paso de baile que llevo 20 años ensayando y que a Ortega Cano le saldría mejor. Michael, cada vez que vea a un viejo en la plaza de mi barrio leyendo el periódico con sus pantalones cortos mostrando esos calcetines blancos y los zapatos negros, sabré que estás ahí. Pero eso es porque yo estoy enfermo, ustedes hacedlo como querais....

Y esto de regalo (dedicado a todos los que amamos a el y a la música):